Pasta gratinada con calabacín y mozzarella

Preparación:
Lavar los calabacines y quitarles las puntas, luego cortarlos en cubos.
Póngalos en el tazón de una licuadora.
Agregue el queso parmesano, pecorino, piñones, hojas de albahaca, ajo y sal gruesa.
Licuar hasta obtener una salsa tersa.
Lleva el agua a ebullición en una cacerola grande y agrega la sal.
Cuando el agua hierva, echar la pasta y dejar cocer.
Escurre la pasta y viértela en una ensaladera con el pesto de calabacín, los piñones y los trozos de mozzarella.
Mezcle rápidamente.
Vierta la pasta en una fuente para horno.
Completar el gratinado con el parmesano rallado.
Hornear a 180°/200° durante 30 minutos: el gratinado debe quedar dorado y crujiente.
Retire el gratinado del horno y déjelo enfriar unos minutos antes de servir.